Este rosal de Austin, se puede cultivar como arbusto o como trepador de pequeño tamaño, un metro ochenta aproximadamente, dependiendo del tipo de injerto y de la poda que se le aplique, lo que lo hace adecuado para lugares donde no se dispone de mucho espacio. Es un rosal carmesí brillante, muy fragante con aroma de rosa antigua, cuyos pétalos toman un color más oscuro con la edad, aunque los capullos crecen erectos como se puede observar, una vez que las flores se abren tienden a colgar, lo que se acentúa todavía más en tiempo lluvioso, sin embargo resisten bastante bien el clima húmedo. El nombre le viene del personaje de la novela de Thomas Hardy, y apareció en el mercado en 1998, aunque parece que actualmente tiende a ser sustituido por otros rosales con características mejoradas.