domingo, 29 de noviembre de 2009
Rosal “Rosy Cushion”
martes, 17 de noviembre de 2009
Rosal Louise Odier, una rosa antigua
Este rosal fue introducido en nuestros jardines allá por el año 1851, se trata de un rosal de los llamados de Borbón, creación del experto jardinero francés y cultivador de rosas Jacques Julien Margottin, que creó un total de 76 nuevas variedades de rosales entre 1845 y 1877. De todas ellas “Louise Odier” es una de las que mejor ha sobrevivido al paso del tiempo, y no es de extrañar es un rosal bastante sano, que puede alcanzar el metro ochenta de altura sin ser un trepador, por lo que a veces se le ha cultivado como rosal pilar. Florece de forma ininterrumpida durante todo el verano, con flores en racimo, muy apretadas, cuarteadas y con una intensa fragancia a caramelos ácidos cuando se abren y luego evolucionan a la maravillosa fragancia de las rosas antiguas.
El follaje es verde suave y sus ramas son abiertas y algo colgantes. A mi este rosal, con su característico aspecto de antaño, me parece muy adecuado para ser cultivado junto a otras plantas que son típicas del “cottage” inglés, con diseño informal y plantas sencillas de las de toda la vida, o lo que los franceses denominan “jardin de curé”, jardín de párroco.
Plantado en plena tierra también podría ser un buen rosal para setos y borde mixto, combinado con otros arbusto y plantas vivaces .
En maceta se comporta bastante bien y florece repetidamente pero su desarrollo queda limitado por el tamaño del recipiente.
jueves, 12 de noviembre de 2009
La Jara blanca o Cistus albidus
Es un pequeño arbusto de hasta un metro de altura, bastante común en toda la zona mediterránea de España y del resto de Europa, sobre terrenos calizos preferentemente, en Asturias yo diría que es muy rara y sólo se encuentra donde las condiciones climáticas y del terreno le son favorables. Hace unos años recolecté algunas cápsulas con semillas en el Jardín Botánico Atlántico y las sembré. Al cabo de dos años empezaron a florecer, con estas flores malvas pentapétalas de aspecto delicado como de papel de muselina y en el centro destacando, sus estambres dorados.
El nombre común de Jara blanca y el latino de C. albidus nos inducen a confusión ya que nos hace pensar en un arbusto de flores blancas, pero sucede que los nombres hacen referencia a las hojas y no a las flores. En efecto las hojas están recubiertas como de un tomento blanquecino que se acentúa en climas cálidos y posición soleada, además están cubiertas de una sustancia pegajosa, el ládano, una resina que antiguamente se usaba por sus propiedades medicinales.
Las jaras son arbustos muy resistentes a la sequía como buenas especies autóctonas del Mediterráneo, y deberían ser más utilizadas en nuestros jardines ya que se adaptan perfectamente a nuestras condiciones estivales y piden muy pocos cuidados a cambio de sus bonitas flores de las que las hay de varios colores del blanco puro o con manchas marrones al rosa y el malva; y florecen durante una larga temporada durante el verano.
En el norte donde el clima es lluvioso es esencial asegurarnos de que el terreno drene perfectamente y no se encharque, ya que la pudrición de las raíces es el mayor enemigo, y por supuesto necesitan mucho sol. En plena tierra estas condiciones las podemos propiciar cultivándolas sobre montículos o en terrenos inclinados donde el agua escurra fácilmente. En jardineras debemos mezclar el sustrato con piedrecitas, mejor si son calizas y procurar que los agujeros de desagüe no se obstruyan.
A mi me gustan mucho estas pequeñas joyas de nuestra naturaleza y creo que son perfectas para colocarlas en jardineras sobre los alfeizares de las ventanas más soleadas de la casa.
lunes, 9 de noviembre de 2009
Cassia floribunda, Senna corymbosa
Este arbusto o pequeño árbol es también llamada Senna floribunda y pertenece a una amplia familia de árboles, arbustos y plantas herbáceas de hojas paripinnadas de la familia de las leguminosas. Todas tienen origen en zonas tropicales y subtropicales del planeta, principalmente de Asia y América. Algún miembro de este género se utiliza con profusión en tisanas adelgazantes y medicamentos debido a su potente efecto laxante, son las conocidas hojas de Sen.
El arbolito de la foto tiene apenas un año, fue adquirido en unos conocidos grandes almacenes en la típica caja de cartón, lo compre un poco por curiosidad y la verdad es que me siento satisfecho de como se ha desarrollado. Ha aguantado el invierno al exterior con una protección mínima, a alcanzado cerca de metro y medio en un tiempo récor y ha florecido espectacularmente a finales del verano y principios de otoño, todo ello en una maceta de plástico de apenas 25 cm de diámetro, ¿qué más se puede pedir?
Estos arboles pueden alcanzar los 2 metros más o menos en una maceta de unos 20 litros y resisten hasta cierto punto la sequía, aunque en una pequeña maceta como la que tiene este ejemplar obliga a regara a diario en pleno verano, asegurándose siempre de que tenga un drenaje perfecto ya que el encharcamiento podría matarlo. También agradecen el suministro de un fertilizante como el que se aplica a los rosales, de este modo florecerán mucho más. Necesita un lugar soleado y resguardado de los vientos fuertes.
La mayoría de las especies de este genero tienen flores amarillas pero también las hay con flores color rosa. Las flores en racimos duran un mes en las ramas y a continuación, donde el clima lo permita, se trasformarán en típicas vainas colgantes que caracterizan a las leguminosas. Sus hojas muy decorativas se pliegan todos los días al atardecer . La especie es de hoja caduca en nuestras latitudes, en esas condiciones se puede trasladar a un lugar fresco y protegido durante el invierno, donde no necesitará mucha luz ni agua hasta que vuelva a rebrotar en primavera.
En lugares de clima suave será un buen árbol de jardín que se puede combinar con otros tropicales como el jacarandá de flores azules, pero en el norte podemos conseguir el mismo efecto cultivándolo junto a Solanum rantonetti.